La primera manifestación de muchas para frenar el Dragon Mart, advierten ciudadanos

PUERTO MORELOS, MX.-Aunque fue notoria la desorganización, la convocatoria para clausurar simbólicamente el Dragon Mart logró reunir a alrededor de 150 personas: ciudadanos de Cancún y Playa del Carmen, estudiantes, habitantes de Puerto Morelos, extranjeros residentes, y representantes de diversas organizaciones que expresaron con carteles y de las más variadas formas, su rechazo a la construcción del Dragon Mart Cancún.

De acuerdo al llamado hecho en redes sociales, la hora de la cita para escuchar los posicionamientos de los ciudadanos era a las dos de la tarde, en el kiosko de Puerto Morelos, pero el inicio del acto se demoró por casi dos horas debido a que la caravana de unos 30 automóviles, provenientes de Cancún, y que pasó a clausurar simbólicamente el predio donde se realizará la obra, tuvo algunos contratiempos; como el hecho de que en el lugar se encontraba el representante de los inversionistas, Juan Carlos López Rodríguez.

La activista Laura Celaya una de las ciudadanas que confrontó al también inversionista del Dragon Mart, aseguró que Juan Carlos López volvió a reiterar que cuenta con todos los permisos para iniciar la construcción del proyecto, y será el próximo martes cuando dé a conocer detalles de los mismos; la ciudadana cuestionó el apoyo que han dado el gobierno estatal, al autorizar los permisos ambientales, y el gobierno federal al anunciar un tren transpeninsular que servirá para mover la mercancía china: “una parada de este tren está precisamente allí, en donde va a estar el Dragon Mart”, aseveró Laura Celaya.

Ante unos 50 manifestantes, Juan Carlos López los invitó a aclarar dudas sobre el proyecto, y a conocer con precisión lo que se pretende construir, pero, sus argumentos “atentan contra la inteligencia de la ciudadanía”, señalaron algunos de los asistentes a la manifestación.

La espera y los personajes del pueblo

Mientras se esperaba el arribo de la caravana de Cancún, en el kiosko de Puerto Morelos la desorganización fue más evidente; y algunos participantes que no querían ser identificados como César Escudero, insistían en “poner orden” ante las sugerencias de algunos veteranos activistas, y pioneros de las luchas en la protección y defensa del medio ambiente, como Aniceto Caamal, quien invitó a los ciudadanos a ir a la playa e informar a los bañistas sobre las implicaciones que tendrá el Dragon Mart; la propuesta fue atajada por César Escudero, quien se presentó como ciudadano quintanarroense, apartidista, participante del Movimiento YoSoy132, y ex activista del MORENA; pero más tarde, sería él mismo, quien invitaría a “Chencho”,  otro legendario personaje de Playa del Carmen a irse con su megáfono a la playa.

“Chencho”, famoso en Playa del Carmen por “aparecer” en los momentos y lugares más inesperados, con su megáfono y sus variadas arengas, mantuvo la atención sobre el evento gritando consignas en contra del Dragon Mart y pronunciando incluso un discurso que concluyó con un “viva México, cabrones”.

El colorido personaje fue “enviado”, por el joven Escudero con su griterío a la playa, pero  “Chencho” le respondió con su megáfono: “que no me estén callando, me mandan a que vaya a la playa, yo no soy borreguito de nadie”.

En el kiosko y los alrededores grupos de todo tipo aguardaban la llegada de la caravana de autos de Cancún; en el momento de los discursos fue relevante la participación de extranjeros radicados en Puerto Morelos, como Angélica, norteamericana de nacimiento, y naturalizada mexicana, quien en el turno tomó el micrófono para pedir a los asistentes que “no se vayan a sus casas y dejen que esto se muera, porque con esto (el Dragon Mart) apenas se está abriendo la puerta a una nación que quieren ser los dueños del mundo, y sentenció: “este es el primer día, no es el ataúd del Dragon Mart; hoy venimos a conocernos”, expresó.

Cuando el contingente de Cancún arribó, inició la pasarela al micrófono.  Se leyeron los “lineamentos de la movilización”, en el que se destacó que el movimiento tenía por objetivo llevar a cabo la clausura ciudadana del predio; se reiteró el carácter apartidista, ciudadano y pacífica de la convocatoria.

En su turno, Ricardo Lujambio, de “Fundadores de Cancún”, reiteró que la protesta contra el Dragon Mart era enérgica pero no violenta, lo anterior en referencia que en el predio “se calentaron” los ánimos, dijo, entre algunos participantes y el promotor del proyecto. Subrayó su rechazo a que “productos chinos invadan el país”, limiten el empleo de los mexicanos, y se afecte el medio ambiente con un proyecto como el propuesto. Consideró que el Dragon Mart estimula la corrupción entre gobernantes e inversionistas, además de que éste se ha dado con total falta de transparencia, con un convenio ilegal que favorece con descuentos de impuestos a los inversionistas, y que nunca antes se han otorgado a ningún empresario ni nacional ni extranjero. Reiteró que dentro de las tres Unidades de Gestión (UGA’s) en las que se ubicaría el proyecto, no es posible realizar lo que se pretende, sin violentar los ordenamientos ambientales  y urbanos.

Lujambio destacó que el gasto en infraestructura que se deberá realizar con recursos públicos para el área donde se asentaría el Dragon Mart representa un negocio sólo para unos cuantos: “nos quieran meter un negocio para unos cuantos que nosotros pagaríamos con millones de pesos en obras. Reiteró que es necesario defender la vocación turística del Caribe mexicano, y proteger la fragilidad ambiental.

La mala nota la dio Laura, una joven representante del movimiento YoSoy132 de Cancún, quien se pronunció contra la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat); la Secretaría de Medio Ambiente del estado y en contra del Centro de Derecho Ambiental (Cemda), por apoyar el Dragon Mart. La joven refirió algunos de los comentarios que expertos en diversas áreas hicieron en el foro organizado por la Universidad del Caribe, el 28 de noviembre pasado.

A cargo del moderador corrió la corrección a la integrante del 132, en el sentido de que el Cemda es precisamente una de las organizaciones que con mayor tenacidad ha dado la batalla, sobre todo legal, en contra del Dragon Mart.  

Otro ciudadano que expresó su descontento fue Francisco Pérez, quien llamó a hacer frente a los “truanes y ladrones que quieren vender nuestro patrimonio”; y advirtió que se toparán con una nueva ciudadanía que exige y a la que deben tomar en cuenta;  “no estamos contra las inversiones, sino en contra de que nos pisoteen”; subrayó.

Pero sin duda, Aniceto Caamal, integrante del MOCE Yax Kuxtal, se llevó la mayor ovación, pues inició su discurso en maya, y aunque muy pocos de los presentes lo entendieron, todos lo sintieron. Ya en español, Aniceto Caamal  recordó que el pueblo maya enfrentó más de 50 años una guerra de castas y la ganó, porque a pesar de ésta, la cultura maya sigue viva, dijo; pero, “la gente maya sigue sin recibir atención, mientras el gobierno piensa traer una inversión de chinos”; reprochó.

“Tenemos derecho a hacer las cosas con sabiduría, como nuestros ancestros; no somos copia de ninguna cultura, somos mexicanos y nos vamos a defender”; gritó el activista, quien fue despedido con aplausos.

La lista de participantes siguió, y el acto concluyó con el compromiso de mantener el movimiento activo, más allá del sofá y del activismo virtual. (NoticaribeNews)